LA GUERRA DE LOS TREINTA AÑOS
Este conflicto inició en 1618 cuando el principado protestante de Bohemia se reveló contra su rey Fernando II quien era católico. Este aplastó la revuelta, pero los principados alemanes apoyaron a los rebeldes y el conflicto se expandió e involucró a España, Inglaterra, Holanda, Dinamarca, Suecia y Francia. Así un conflicto inicialmente religioso se convirtió en una conflagración internacional por la supremacía política en el continente. Es el caso de Francia, un país católico, se alió con un bando protestante porque su objetivo era debilitar a la monarquía hispánica. La paz de Westfalia (1648) puso fin a la guerra y significó el fin de la hegemonía española en Europa y el ascenso de Francia como potencia hegemónica.
En la primera mitad el siglo XVII se pusieron las bases de la futura supremacía francesa. Durante el reinado de Luis XIII, el gobierno estuvo en manos del cardenal Richelieu que fortaleció la autoridad real y la consolidación del poder de Francia en Europa.
EL ABSOLUTISMO POLITICO
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Entre los siglos XVII y XVIII gran parte de los estados europeos adoptaron una forma de gobierno conocida como el absolutismo: todo el poder de un Estado se concentraba en la figura del rey quien ejercía su autoridad sin ningún control, por ello las atribuciones de las asambleas de representantes fueron limitadas. Las decisiones del gobierno las tomaba el monarca apoyado por un gran aparato administrativo que cobraba los impuestos, con los que se financiaban los gastos de la burocracia, la corte y las guerras. Este sistema fue justificado por algunos religiosos, filósofos y juristas de la época. Los más importantes: Jacques Bossuet, Thomas Hobbes.
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ACTIVIDAD 7
1. Explique las causas de decadencia de la hegemonía española en el siglo XVII
2. Investiga ¿En qué consistió la guerra de los treinta años y sus consecuencias?
3. ¿Qué es el absolutismo político?
